HUARGO
El aspecto de esta criatura es el de un lobo de gran tamaño aunque no sólo son más grandes, sino que son más fieros e inteligentes.
Habitan en las tierras nórdicas de Riarda y a menudo representan un peligro para granjeros, caravanas y viajeros. Aunque en las épocas cálidas del año los ataques disminuyen, las víctimas en invierno representan un número importante.
Se cree que antiguamente los bárbaros del norte les usaban como montura para viajar o para acudir a las batallas, sin embargo en la actualidad raramente se ve humanos a lomos de huargos. Sus jinetes más conocidos son los orcos y los goblins.
Aunque se trata de un animal salvaje por naturaleza, en algunos lugares de Riarda se les entrena desde cachorros como guardianes para hogares y terrenos. Aunque en muchos casos los dueños cuentan con un compañero y defensor único, algunos huargos pueden volverse contra sus propietarios, lo que les convierte en una "mascota" de dudosa reputación.
Durante un tiempo los brujos firmaban con asiduidad contratos para dar cazas a manadas de huargos que aterrorizaban una zona, sin embargo, las creencias religiosas de algunos pueblos consideraban a los huargos unos seres protectores de los bosques, por lo que el negocio de su caza cesó en muchos lugares.
En Vinorg se conoce a los huargos como "grandes lobos" y fueron conocidos por formar parte de las famosas legiones verdes. Al final de la Guerra Negra, los grandes lobos que sobrevivieron se retiraron a los bosques donde continuaron viviendo como criaturas salvajes.
Muchos de ellos optaron por irse al Bosque de los Mil Cantares, donde sus vástagos se convirtieron en un nuevo enemigo para los elfos, acostumbrados a cánidos menos violentos.