ENANO
Rudos, malhablados, juerguistas, orgullosos, bebedores... con seguridad entre todas las razas los enanos son los mejores amigos del hombre.
Aunque antiguamente vivían exclusivamente en grandes ciudades excavadas bajo las montañas, con los años no sólo ha aumentado su población en ciudades humanas, sino que han empezado a contruir sobre la superficie. Ortrido es el gran ejemplo de cómo los enanos ya viven como los humanos. Sin embargo, muchos aseguran que debajo de la propia ciudad se extienden millares de galerías subterráneas tan sólo conocidas por los propios enanos.
Los enanos son conocidos por muchas cosas, pero la que sin duda les da más fama es por sus habilidades con la herrería, únicas en el mundo.
Dueños de las mayores siderúrgicas y creadores de minas colosales, los enanos adoran en cuerpo y alma el arte de picar, fundir y crear.
A pesar de que existen magos enanos, esta raza cuenta con una figura propia que desempeña esta función mágica: los maestros rúnicos.
Como su propio nombre indica, su poder reside en las antiquísimas runas y son expertos en extraer energía de la tierra y de las rocas.
Según muchos, las mujeres enanas son las menos atractivas entre todas las razas, tan sólo deseables por los propios enanos.
Sin embargo, todos los enanos viven convencidos de que el mundo acecha lascivo a sus mujeres e hijas y son muy sensibles en este aspecto.
Aunque no muchos piensan de igual manera, nadie se atreve nunca a contradecirles, ya que las hachas y cuchillos de estos caballeros fornidos y bajitos tienen la mala costumbre de salir con increíble facilidad de sus cinturones.
